| 1 | Asà dice el Señor: «Ve a la casa del rey de Judá, y proclama allà este mensaje: | |
| 2 | Tú, rey de Judá, que estás sentado sobre el trono de David, y tus oficiales y tu pueblo, que entran por estas puertas, escuchen la palabra del Señor. | |
| 3 | Asà dice el Señor: ‘Practiquen el derecho y la justicia. Libren al oprimido del poder del opresor. No maltraten ni hagan violencia al extranjero, ni al huérfano ni a la viuda, ni derramen sangre inocente en este lugar. | |
| 4 | Si de veras cumplen con esta palabra, entonces por las puertas de este palacio entrarán reyes que ocuparán el trono de David; entrarán en carros y a caballo, acompañados por sus oficiales y su pueblo. | |
| 5 | Pero si no obedecen estas palabras, juro por mà mismo que este palacio se convertirá en un montón de ruinas. Yo, el Señor, lo afirmo. » | |
| 6 | Porque asà dice el Señor acerca de la casa real de Judá: «Para mÃ, tú eres como Galaad y como la cima del LÃbano, pero juro que te convertiré en un desierto, en ciudades deshabitadas. | |
| 7 | Enviaré contra ti destructores, cada uno con sus armas, que talarán tus cedros más hermosos y los echarán en el fuego. | |
| 8 | »Gente de muchas naciones pasará por esta ciudad, y se preguntará: ¿Por qué habrá tratado asà el Señor a esta gran ciudad? | |
| 9 | Y se le responderá: Porque abandonaron el *pacto del Señor su Dios, adorando y sirviendo a otros dioses. » | |
| 10 | No lloren por el que está muerto, ni hagan lamentaciones por él. Lloren más bien por el exiliado, por el que nunca volverá ni verá más la tierra en que nació. | |
| 11 | Asà dice el Señor acerca de Salún hijo de JosÃas, rey de Judá, que ascendió al trono después de su padre JosÃas y que salió de este lugar: «Nunca más volverá, | |
| 12 | sino que morirá en el lugar donde ha sido desterrado. No volverá a ver más este paÃs. | |
| 13 | »¡Ay del que edifica su casa y sus habitaciones superiores violentando la justicia y el derecho! ¡Ay del que obliga a su prójimo a trabajar de balde, y no le paga por su trabajo! | |
| 14 | ¡Ay del que dice: Me edificaré una casa señorial, con habitaciones amplias en el piso superior! Y le abre grandes ventanas, y la recubre de cedro y la pinta de rojo. | |
| 15 | »¿Acaso eres rey sólo por acaparar mucho cedro? Tu padre no sólo comÃa y bebÃa, sino que practicaba el derecho y la justicia, y por eso le fue bien. | |
| 16 | DefendÃa la causa del pobre y del necesitado, y por eso le fue bien. ¿Acaso no es esto conocerme? afirma el Señor. | |
| 17 | »Pero tus ojos y tu *corazón sólo buscan ganancias deshonestas, sólo buscan derramar sangre inocente y practicar la opresión y la violencia.» | |
| 18 | Por eso, asà dice el Señor acerca de Joacim hijo de JosÃas, rey de Judá: «Nadie lamentará su muerte ni gritará: ¡Ay, mi hermano! ¡Ay, mi hermana! Nadie lamentará su muerte ni gritará: ¡Ay, señor! ¡Ay, Su Majestad! | |
| 19 | Será enterrado como un asno, y lo arrastrarán y lo arrojarán fuera de las *puertas de Jerusalén.» | |
| 20 | «¡Sube al LÃbano y grita; levanta tu voz en Basán! ¡Grita desde AbarÃn, pues todos tus amantes han sido destruidos! | |
| 21 | Yo te hablé cuando te iba bien, pero tú dijiste: ¡No escucharé! Asà te has comportado desde tu juventud: ¡nunca me has obedecido! | |
| 22 | El viento arrastrará a todos tus *pastores, y tus amantes irán al cautiverio. quedarás avergonzada y humillada. | |
| 23 | Tú, que habitas en el LÃbano, que has puesto tu nido entre los cedros, ¡cómo gemirás cuando te vengan los dolores, dolores como de parturienta! | |
| 24 | »¡Tan cierto como que yo vivo afirma el Señor, que aunque JeconÃas hijo de Joacim, rey de Judá, sea un anillo en mi mano *derecha, aun de allà lo arrancaré! | |
| 25 | Yo te entregaré en manos de los que buscan matarte, y en manos de los que tú más temes, es decir, en poder de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y de los *babilonios. | |
| 26 | A ti y a la madre que te dio a luz los arrojaré a un paÃs que no los vio nacer, y allà morirán. | |
| 27 | Jamás volverán al paÃs al que tanto anhelan volver.» | |
| 28 | ¿Es JeconÃas una vasija despreciable y rota, un objeto que nadie desea? ¿Por qué son arrojados él y su descendencia, y echados a un paÃs que no conocen? | |
| 29 | ¡Tierra, tierra, tierra! ¡Escucha la palabra del Señor! | |
| 30 | Asà dice el Señor: «Anoten a este hombre como si fuera un hombre sin hijos; como alguien que fracasó en su vida. logrará ocupar el trono de David, ni reinar de nuevo en Judá.» | |